Debido al incremento de la incidencia de miopía, existe un incremento exponencial del número de investigaciones que se centran en determinar cuáles son las estrategias y tratamientos más apropiados para el control de la miopía. Todo ello ha llevado también a que ópticos-optometristas y oftalmólogos utilicen estas estrategias en su práctica clínica diaria. Una labor esencial del óptico-optometrista es la del diagnóstico y tratamiento de alteraciones de la función visual, por lo que debe conocer los efectos que las distintas estrategias de control de miopía pueden tener en la sintomatología y función visual, con el objetivo de asegurar un estado óptimo de la función visual en los pacientes tratados con las diferentes estrategias disponibles para frenar la progresión miópica.
En este curso se expondrá la evidencia científica que existe sobre los efectos que las distintas estrategias de control de miopía pueden tener en la sintomatología, función y rendimiento visual y se analizará el balance riesgo/beneficio de cada una de ellas. Además, se hará hincapié en el proceso de neuro-adaptación que se produce con los distintos tratamientos y cómo debería actuar el óptico-optometrista en cada caso, para prescribir la estrategia de control de miopía más beneficiosa.