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20/07/2022
Nuestra profesión se mueve en un entorno cambiante. Comparando el trabajo que se realizaba hace diez años con el trabajo realizado ahora, se observa una transformación, y no solo en la consulta, sino también en el tipo de cliente, en los servicios ofrecidos, en las necesitades, etcétera. Enfrentarse a estos retos puede generar una sensación de inseguridad que puede atenazar o evitar que los abordemos.
Pero en el caso de la miopía no se debe huir, pues con la información que tenemos actualmente ya sabemos que el abordaje clásico debemos apartarlo y aquellos que todavía no hayan dado este paso deben enfrentarse al desafío.
Si consultamos las diferentes guías y manuales que se manejan principalmente en el ámbito de la empresa, enfrentarse a nuevos desafíos profesionales se suele denominar “salir del círculo de confort”. Hay infinidad de decálogos sobre cómo afrontar retos y, cada uno de los profesionales que se ha enfrentado a esta situación, cuenta con las herramientas necesarias para abordarlos. El interesado habrá recibido preparación profesional y tendrá sus propias estrategias para afrontar los nuevos desafíos. El objetivo de estas líneas es ayudar a aplicar en la consulta este reto clínico y empresarial que supone el obstáculo creciente de la miopía.
